Esta noche, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dará un discurso en la reunión anual del Banco Central en Jackson Hole, que será su última aparición en esta capacidad. Este discurso es ampliamente visto como un indicador importante de la política de la Reserva durante la era Powell.
Aunque el mercado tiene diferentes especulaciones sobre si habrá o no una reducción de tasas, considerando la información actual de todas las partes, es muy probable que Powell mantenga una postura más restrictiva. Es importante destacar que esta decisión parece depender no solo de los indicadores económicos de Estados Unidos, sino que refleja en mayor medida consideraciones políticas, especialmente la lucha entre la izquierda y la derecha.
Tradicionalmente, Wall Street tiende a apoyar políticas de izquierda, ya que esto beneficia la libre circulación del capital internacional, alineándose con las demandas de grandes empresas, élites financieras y ciertos grupos de intereses especiales. En contraste, la derecha, especialmente el grupo MAGA, representa más los intereses de los grupos de ingresos medios y bajos y de las pequeñas y medianas empresas.
Esta tendencia política podría explicar por qué, a medida que se acerca el final del mandato de Biden, a pesar de la mala situación económica, Powell ha relajado la política monetaria en dos ocasiones consecutivas, tratando de crear una ilusión de prosperidad económica. Y durante la presidencia de Trump, incluso cuando los datos económicos de EE. UU. mostraban signos de recuperación, Powell se mantuvo cauteloso y no estaba dispuesto a aflojar la política monetaria fácilmente.
Por lo tanto, el resultado del discurso de esta noche es casi predecible, y es probable que se mantenga una postura de endurecimiento. Para los traders a corto plazo, esto podría ser una oportunidad. Pero para los inversores a largo plazo, las declaraciones de Powell ya son menos importantes. Porque, independientemente de lo que diga, es muy probable que el próximo presidente de la Reserva Federal (FED) sea un partidario del grupo MAGA.
Basado en las características de orientación a corto plazo de la política democrática de Estados Unidos, la impresión masiva de dinero podría convertirse en una elección inevitable en el futuro. Esta proliferación monetaria podría, en última instancia, resaltar el valor de criptomonedas como Bitcoin, impulsando su precio a seguir aumentando.
De todos modos, el discurso de Powell sin duda se convertirá en el centro de atención del mercado, y su impacto en la dirección futura de la política monetaria de Estados Unidos merece nuestra atención.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
14 me gusta
Recompensa
14
6
Republicar
Compartir
Comentar
0/400
GateUser-40edb63b
· hace21h
Izquierda derecha izquierda derecha, ¿quién no lo hace por el 💰?
Ver originalesResponder0
BlindBoxVictim
· hace22h
El viejo Bao va a jugar con flores de nuevo.
Ver originalesResponder0
StablecoinAnxiety
· hace22h
Después de tanto tiempo, BTC es el único ancla.
Ver originalesResponder0
SurvivorshipBias
· hace22h
Eh, no es más que un juego político.
Ver originalesResponder0
AllTalkLongTrader
· hace22h
Otra vez se está especulando con BTC.
Ver originalesResponder0
AirdropATM
· hace22h
Otra día de manipulación del margen de puntos que provoca inflación.
Esta noche, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dará un discurso en la reunión anual del Banco Central en Jackson Hole, que será su última aparición en esta capacidad. Este discurso es ampliamente visto como un indicador importante de la política de la Reserva durante la era Powell.
Aunque el mercado tiene diferentes especulaciones sobre si habrá o no una reducción de tasas, considerando la información actual de todas las partes, es muy probable que Powell mantenga una postura más restrictiva. Es importante destacar que esta decisión parece depender no solo de los indicadores económicos de Estados Unidos, sino que refleja en mayor medida consideraciones políticas, especialmente la lucha entre la izquierda y la derecha.
Tradicionalmente, Wall Street tiende a apoyar políticas de izquierda, ya que esto beneficia la libre circulación del capital internacional, alineándose con las demandas de grandes empresas, élites financieras y ciertos grupos de intereses especiales. En contraste, la derecha, especialmente el grupo MAGA, representa más los intereses de los grupos de ingresos medios y bajos y de las pequeñas y medianas empresas.
Esta tendencia política podría explicar por qué, a medida que se acerca el final del mandato de Biden, a pesar de la mala situación económica, Powell ha relajado la política monetaria en dos ocasiones consecutivas, tratando de crear una ilusión de prosperidad económica. Y durante la presidencia de Trump, incluso cuando los datos económicos de EE. UU. mostraban signos de recuperación, Powell se mantuvo cauteloso y no estaba dispuesto a aflojar la política monetaria fácilmente.
Por lo tanto, el resultado del discurso de esta noche es casi predecible, y es probable que se mantenga una postura de endurecimiento. Para los traders a corto plazo, esto podría ser una oportunidad. Pero para los inversores a largo plazo, las declaraciones de Powell ya son menos importantes. Porque, independientemente de lo que diga, es muy probable que el próximo presidente de la Reserva Federal (FED) sea un partidario del grupo MAGA.
Basado en las características de orientación a corto plazo de la política democrática de Estados Unidos, la impresión masiva de dinero podría convertirse en una elección inevitable en el futuro. Esta proliferación monetaria podría, en última instancia, resaltar el valor de criptomonedas como Bitcoin, impulsando su precio a seguir aumentando.
De todos modos, el discurso de Powell sin duda se convertirá en el centro de atención del mercado, y su impacto en la dirección futura de la política monetaria de Estados Unidos merece nuestra atención.